Capacidad de orientación
El sentido de la orientación o la capacidad de navegación, puede ser un rasgo intrigante que distinga a los individuos. A diferencia de lo que se pueda pensar, este rasgo no se aprende, sino que se hereda, y en él incide sobre todo la genética materna. Si te pierdes con frecuencia o te cuesta orientarte, quizás debas atribuirlo a la genética de tu madre.
El sentido de orientación suele ser una característica familiar compartida, que se transmite de generación en generación debido a su base genética. Aunque los individuos pueden desarrollar estrategias y utilizar la tecnología para mejorar sus habilidades de navegación, comprender la predisposición genética que subyace a su sentido de la orientación puede ayudarles a navegar por el mundo con una mejor comprensión de por qué sobresalen o a veces se encuentran un poco desorientados.