Encerrados
Ya sabes lo que dicen, si no tienes lealtad, no tienes nada. Estos contratos eran como estar en una relación a largo plazo, excepto que tu pareja era una enorme corporación que poseía tu alma. Pero, hablando en serio, entiendo las ventajas de los contratos a largo plazo. Ofrecían seguridad y estabilidad laboral, algo que probablemente muchos actores de hoy envidian.
Por supuesto, también tenían sus inconvenientes, como estar atrapado en un puesto que odiabas o no poder trabajar en proyectos que te apasionaban. Pero bueno, todo es parte del juego. Hoy en día, los actores tienen mucha más libertad para elegir sus papeles y trabajar con diferentes estudios, pero eso tiene un costo.